Argimón: hay declaraciones desde el FA que «incitan a la violencia social, institucional»
En la tarde de este lunes, luego de la sesión del Directorio del Partido Nacional, su presidenta y actual candidata a vicepresidente, Beatriz Argimón, dijo en conferencia de prensa que en esta instancia «hubo una insistente preocupación de alguna actitud por parte de la dirigencia frenteamplista que podemos decir que incitan a la violencia social, institucional, augurando de alguna manera que si el resultado electoral les es adverso habría una enorme movilización social, trasladando nuevamente miedos, y tratándolo de vincular en un contexto regional y mundial, que no compartimos obviamente».
«Nuestra sociedad tiene características que todos conocemos, de respeto institucional, y nos parece que nada contribuyen a esta campaña precisamente augurar, determinar episodios que realmente estarían mostrando que la sociedad no estaría respetando un resultado electoral que, si hay algo que respeta esta sociedad democrática uruguaya y mucho nos enorgullece son los resultados electorales», subrayó Argimón.
En la misma línea, señaló que «lo que da miedo en esta campaña es precisamente la campaña de mentiras, porque la mentira no es la forma«.
En tanto, luego de evaluar el último proceso electoral, le plantearon a Ana Lía Piñeyrúa, representante del Partido Nacional en la Corte Electoral, que «así como hay tantas campañas de bien público que desde el gobierno se llevan adelante, que pueda haber frente a la otra instancia electoral una campaña que informe a los ciudadanos cuál es la forma de votar, la existencia de dos papeletas, y que se votan dos fórmulas presidenciales», y también «la posibilidad de que se amplíe el número de papeletas que se le den a las mesas».
Por otro lado, consultada por periodistas, Argimón dijo que no tiene «ningún problema» en debatir con la candidata a vicepresidente por el Frente Amplio, Graciela Villar. «Desde el momento mismo que asumimos este rol hemos dicho que sí, pero nada nos va a salir del eje de nuestra campaña que es precisamente estar en contacto con la gente. Esa es nuestra prioridad. Si se da la oportunidad, por supuesto», dijo la candidata a vicepresidenta nacionalista.
Respecto a la ampliación de la denuncia sobre las noticias falsas en esta campaña electoral que hicieron los blancos el viernes pasado, el diputado Pablo Abdala, que acompañó en esta oportunidad a Argimón, dijo que con esto quisieron «darle una señal al sistema político de que el Partido Nacional está atento a estas circunstancias, y a la población también, por eso llevamos todo a la Justicia, para que la gente sepa que las cosas acontecen y que eventualmente los 20 días que nos quedan de campaña electoral pueden seguir aconteciendo y se pueden llegar a incrementar».
Sobre las denuncias, el diputado nacionalista dijo que «no» acusan a un partido político en partido particular, «pero está claro de dónde vienen estos planteamientos y actividades totalmente sucias desde el punto de vista de la competencia electoral».
Respecto a la preocupación que antes manifestó Argimón sobre declaraciones que «incitan a la violencia social, institucional», Abdala dijo: «En todo caso, lo que la ciudadanía tiene que evaluar es qué es lo que puede pasar si seguimos como estamos, porque creo que hoy hay situaciones que hablan de la emergencia y de la necesidad urgente de que haya un cambio político en el país».
En la tarde de lunes, luego de la reunión que mantuvo con César Vega, Lacalle Pou fue consultado al respecto y señaló: «Veo en algunos dirigentes del Frente (Amplio), algunos con una responsabilidad institucional enorme, como es el caso de (Lucía) Topolansky, que el temor a dejar el poder les está llevando a sobrepasar límites que en Uruguay no se habían sobrepasado. Anunciar movilizaciones, inestabilidad, no nos parece que haga mucho a la responsabilidad cívica que tenemos los dirigentes políticos».
La vicepresidenta Topolansky declaró el 31 de octubre a la agencia Sputnik que si Lacalle Pou gana la Presidencia y envía la ley de urgente consideración al Parlamento «generará una movilización social enorme que podría producir inestabilidad».
Fuente: El País