El Senador Lacalle Pou cuestionó al gobierno la falta de transparencia y el «desaprovechamiento» de la «época de oro»

Haciendo oídos sordos a las críticas del presidente Tabaré Vázquez, quien días atrás volvió a calificar sus propuestas como «pompitas de jabón», el senador nacionalista Luis Lacalle Pou salió en los últimos días a exponer las principales ideas del sector Todos y a criticar con dureza la gestión del gobierno frenteamplista.
Este lunes, Lacalle Pou replicó en una serie de entrevistas radiales los principales puntos que tocó durante el congreso nacional de su sector, realizado este domingo en Flores.
Desde las siete hasta las nueve y media de la mañana, Lacalle Pou habló en cuatro radios distintas (El Espectador, Oriental, Sarandí y Carve) y en todas tocó los mismos puntos que en su discurso del fin de semana. Entre ellos, dijo que el Frente Amplio desaprovechó una «época de oro» en materia económica, que el apartamiento de la ética en sus gobernantes tuvo un costo económico que aún pagan los ciudadanos, y que las divisiones internas del partido de gobierno –sumadas al poder de las corporaciones– tienen «congelados» a los proyectos más urgentes que reclama el país.

Transparencia y ética

El líder nacionalista puso a la transparencia en el eje de su discurso y las críticas al gobierno. Por un lado, se refirió a decisiones políticas reñidas con la ética y la moral, y puso como ejemplos los casos de ANCAP, Pluna y los negocios con Venezuela.
Según Lacalle Pou, «la falta de ética no solo atenta contra la moral, sino contra la plata de la gente», ya que genera «daños materiales» que termina pagando toda la población. «Cuando se actúa por fuera de la ética, se daña no solo la confianza –lo más importante- sino la administración», agregó.
En ese sentido, advirtió que «nadie está vacunado» contra la corrupción, pero que «el tema es la capacidad de reacción».
«La peor forma de reaccionar es cerrarse. La mejor forma de reaccionar es decir: como nadie está vacunado yo soy el primero que lo retiro del cargo y lo someto a la justicia», sostuvo el senador. «Cuanto antes se tomen medidas mejor es para la sanidad de un gobierno, la sanidad de la sociedad y para el erario público».

UPM

Por otra parte, Lacalle Pou se refirió a la transparencia del gobierno en ciertas negociaciones como las que está llevando adelante con UPM.
«En lo que hace a la transparencia con UPM, el gobierno tiene que informar, decir lo que está haciendo. No debería ampararse en la confidencialidad desde el momento en que no hay muchos oferentes compitiendo», aseguró. «¿Cuál es la razón de la confidencialidad? Ya tienen las tierras, la materia prima, no hay ningún elemento que pueda distorsionar el negocio. Son más nocivas las noticias parciales e incompletas que sí generan movimientos en el mercado bursátil», aseguró.
El senador dijo que más que «sospechas» tiene «dudas» sobre el desarrollo de las negociaciones, y afirmó que el gobierno no solo tiene que informar a los partidos de la oposición, sino a toda la población. «Hemos tenido la ñata contra el vidrio, y un vidrio oscuro», afirmó en En Perspectiva de Oriental.

El dedo en la llaga de la interna del gobierno

Otro aspecto que denunció el líder nacionalista es la división interna del partido de gobierno, que a su entender «viene trancando» diversas decisiones políticas importantes.
En concreto, Lacalle Pou resaltó el congelamiento del tratado de libre comercio con Chile, y dijo que Vázquez «pasa vergüenza» cuando tiene que explicarle a la presidenta Michelle Bachelet que el Parlamento todavía no ratificó el acuerdo, firmado entre ambos países en octubre de 2016.
«Habla mal de nuestro país que tanto tiempo después de suscrito un tratado no se apruebe en el Parlamento», señaló el legislador.
Por eso, este domingo Lacalle Pou anunció que el Partido Nacional daría sus votos para destrabar la situación si se convocara una sesión extraordinaria, poniendo en evidencia las divisiones que el tema genera en la interna del Frente Amplio.
El senador sabe bien que el Frente Amplio no votará el acuerdo –ni cualquier otra ley– de forma dividida, pero al anunciar la disposición de la oposición a apoyar el tratado, expone las contradicciones internas del partido de gobierno.
«Lo que decimos es que acá están los votos, así el gobierno no pasa vergüenza y avanzamos, aunque sea tímidamente, en las relaciones exteriores que han sido bastante erráticas en estos tiempos», agregó.

Pérdida de autoridad

Según el líder nacionalista, a las tensiones internas del partido de gobierno se suma la presión ejercida por los sindicatos, que terminan jugando un rol central en el éxito o el fracaso de las políticas impulsadas por el oficialismo.
«El gobierno de Vázquez está congelado porque concedió la autoridad, entre otros a las corporaciones», señaló Lacalle Pou y recordó el día en que Vázquez irrumpió en una asamblea del sindicato de ANCAP, en pleno conflicto por el desbaratamiento del seguro médico.
«Hace poco todo el espectro político estaba de acuerdo en que había que reformar algunos ámbitos de ANCAP, y allí fuimos en coincidencia. Y luego el presidente encontrándose con el sindicato y diciendo que dejaba todo por el camino… ¿Quien mandó ahí? El presidente no».

Manejo económico

Lacalle Pou también centró sus críticas en Danilo Astori y la conducción de la economía por parte de su equipo.
Si bien reconoció el crecimiento sostenido de la actividad en todos estos años, el líder nacionalista afirmó en Carve que «la década de oro que (el Frente Amplio) tuvo para administrar termina en un Uruguay con un déficit histórico, con una enorme deuda para futuras generaciones, y con las grandes necesidades para ser libres sin estar satisfechas».
En resumen, subrayó, «no hay mejor educación, hay mejor salud dependiendo de dónde uno se atienda, la gente no está segura, y el Uruguay no se ha vinculado más libremente con el resto del mundo».
Lacalle cuestionó que los mayores niveles de bienestar sean sostenibles en el tiempo y dijo que «dependemos de factores totalmente exógenos para que el país mejore».
A su entender, el gobierno «está jugado a la instalación de una empresa para ver si más o menos saca buena nota». Asimismo, aseguró que «no tenemos la capacidad de asegurar el futuro de los uruguayos» y que «lo único que sabemos para adelante es que estamos endeudados».
El senador dijo que habría que ver no solo la evolución de la deuda sino la situación económica en la que se inscribe. «Una familia cuando está pasando por un mal momento es lógico que se endeude. Una familia cuando todos tienen trabajo, están haciendo horas extra y todavía meten el 5 de Oro, no es muy lógico que se gasten toda la plata que tienen, que no les dé, que no mejoren y aparte que se endeuden», afirmó.
Fuente: El Observador