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Además, descartaron que los fármacos no cuenten con prospectos, tal y como indicaron familiares de los niños afectados. Es que un padre y un abuelo de dos de ellos le reclamaron el lunes a la presidenta de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE), Susana Muñiz, que los medicamentos entregados por la farmacia no tenían sus respectivos prospectos en el interior de la caja.
El laboratorio, que fue adquirido por Roemmers, ganó una licitación en 2014 por la cual fue el encargado de suministrar el medicamento Mulsiferol 600.000 UI/10 ml a distintos hospitales de la red de ASSE. De esta forma, el fármaco fue adquirido por la Unidad Centralizada de Adquisiciones del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
«La dispensación de los medicamentos a la población, según la prescripción del médico tratante, es responsabilidad exclusiva de la farmacia de los centros hospitalarios», consideró el laboratorio.
Por otro lado, reiteró que el Saint Bois no compra la versión pediátrica de la vitamina D, «Mulsi-D3» en su versión en gotas, desde septiembre de 2015.
En este sentido, el director de Marketing de Spefar, Héctor Lluis, informó que si bien existe diferencia de precios entre el medicamento para adultos y para niños, el primero, que fue el fármaco entregado a los pacientes pediátricos por el hospital, es más costoso que el último.
De esta manera, se desestimaría la versión que indica la conveniencia del prestador de salud en dar uno y no otro fármaco a los pacientes.
Fuente: El País